Cuando hablamos de dolor cervical, muchas personas confunden términos como cervicalgia y cervicobraquialgia. Aunque ambos afectan la zona del cuello, no son lo mismo. La principal diferencia entre cervicalgia y cervicobraquialgia radica en que la primera se limita a la zona cervical, mientras que la segunda implica la irradiación del dolor hacia los brazos.
A continuación, te explicamos en detalle los síntomas, las causas y los tratamientos de cada una para que puedas entenderlas mejor y saber cuándo acudir a un profesional.
¿Qué es la cervicalgia?
La cervicalgia es el dolor localizado en la zona cervical de la columna vertebral, que puede causar rigidez, tensión muscular y dificultad para mover el cuello. Suele estar relacionada con malas posturas, estrés o problemas degenerativos.
Síntomas de la cervicalgia
La cervicalgia es el término médico para describir el dolor en la zona cervical, que puede variar en intensidad y duración. Sus síntomas incluyen:
- Dolor en la zona del cuello y parte superior de la espalda.
- Rigidez y tensión muscular.
- Dificultad para mover el cuello, especialmente al girar o inclinar la cabeza.
- Dolores de cabeza en la parte posterior de la cabeza (zona occipital).
- Sensación de fatiga en los músculos del cuello.
Causas de la cervicalgia
Las causas más frecuentes de la cervicalgia están relacionadas con la postura y el estilo de vida. Algunas de ellas son:
- Mala postura: pasar muchas horas frente al ordenador o con el móvil puede generar tensión en el cuello.
- Estrés: la tensión emocional puede provocar contracturas musculares en la zona cervical.
- Traumatismos: un golpe o una caída pueden desencadenar dolor cervical, como ocurre en el latigazo cervical tras un accidente de tráfico.
- Artrosis cervical: el desgaste de las vértebras puede ser una causa habitual del dolor crónico.
- Movimientos repetitivos: trabajos o actividades que implican movimientos constantes del cuello pueden generar molestias.
Tratamiento para la cervicalgia
La fisioterapia es clave para aliviar y tratar la cervicalgia. Algunos tratamientos incluyen:
- Terapia manual para liberar tensiones en la columna cervical y el cráneo.
- Ejercicios terapéuticos para fortalecer la musculatura cervical y mejorar la postura.
- Masajes terapéuticos para reducir la rigidez y el dolor.
- Aplicación de calor o frío para desinflamar y mejorar la circulación sanguínea.
- Descanso y corrección postural para evitar recaídas.
- Pilates terapéutico o yoga en fases avanzadas de recuperación y como prevención.
En muchos casos, recurrir a fisioterapeutas a domicilio puede ser una excelente opción para recibir un tratamiento personalizado sin necesidad de desplazarse.
¿Qué es la cervicobraquialgia?
La cervicobraquialgia es un problema más complejo que la cervicalgia, ya que no solo afecta el cuello, sino que también compromete los nervios que van hacia los brazos, causando dolor irradiado.
Síntomas de la cervicobraquialgia
Los síntomas de la cervicobraquialgia incluyen:
- Dolor en el cuello que se extiende hacia uno o ambos brazos.
- Hormigueo o entumecimiento en las manos y dedos.
- Debilidad muscular en los brazos, lo que puede dificultar actividades cotidianas.
- Dolor que empeora con ciertos movimientos del cuello.
- En casos más graves, molestias en los hombros, muñecas o dedos.
Causas de la cervicobraquialgia
Las principales causas de la cervicobraquialgia están relacionadas con la afectación de los nervios cervicales, entre ellas:
- Hernia discal cervical: cuando un disco intervertebral se desplaza y presiona las raíces nerviosas.
- Estenosis cervical: el estrechamiento del canal vertebral puede provocar compresión nerviosa.
- Latigazo cervical: los traumatismos pueden causar irritación o daño en los nervios.
- Patologías degenerativas: como la osteoartritis o la osteofitosis.
Tratamiento de la cervicobraquialgia
El tratamiento de la cervicobraquialgia suele incluir:
- Neurodinamia: técnica que moviliza los nervios para mejorar su función y reducir el dolor.
- Terapia miofascial: se trabaja sobre las restricciones del tejido fascial para mejorar la movilidad y disminuir la tensión.
- Ejercicios terapéuticos y estiramientos activos, guiados por un fisioterapeuta especializado.
- En algunos casos, es recomendable buscar atención especializada, como la que ofrecen nuestros profesionales de fisio en Málaga para tratar problemas cervicales de forma eficaz.
Diferencias clave entre cervicalgia y cervicobraquialgia
Para resumir, cervicalgia es cuando el dolor se limita exclusivamente a la zona cervical y cervicobraquialgia cuando se extiende hacia el hombro e incluso el brazo, pudiendo llegar a ser intenso o incapacitante. Estas son las principales diferencias entre ambas patologías:
| Característica | Cervicalgia | Cervicobraquialgia |
|---|---|---|
| Localización | Dolor en el cuello. | Dolor en cuello y brazos. |
| Síntomas | Rigidez, dolor localizado, fatiga muscular. | Dolor irradiado, hormigueo, debilidad en los brazos. |
| Causas comunes | Mala postura, estrés, artrosis, traumatismos. | Hernia discal, estenosis cervical, afectación nerviosa. |
| Tratamiento | Fisioterapia, masajes, corrección postural. | Neurodinamia, terapia miofascial, ejercicios guiados. |
Si tienes síntomas de cervicalgia o cervicobraquialgia, lo ideal es acudir a un especialista para recibir un diagnóstico adecuado y un tratamiento personalizado.
¿Cuándo acudir a un fisioterapeuta?
Si experimentas dolor persistente en el cuello o en los brazos, debilidad muscular o sensación de hormigueo, es recomendable acudir a un fisioterapeuta lo antes posible. Cuanto antes se inicie el tratamiento, mejores serán los resultados y menor el riesgo de cronificación del problema.
En casos donde la movilidad está reducida o el paciente tiene dificultades para desplazarse, una buena opción es recurrir a fisioterapia geriátrica a domicilio, que permite recibir atención especializada en casa sin necesidad de trasladarse a una clínica.
En resumen, la diferencia entre cervicalgia y cervicobraquialgia es clara: la primera afecta solo el cuello, mientras que la segunda involucra una afectación nerviosa que irradia el dolor a los brazos. Ambas pueden tratarse con fisioterapia, evitando la cronificación del dolor y mejorando la calidad de vida.
Si sufres molestias cervicales, busca la ayuda de profesionales para recibir un tratamiento adecuado y recuperar el bienestar. ¡Tu cuello y tu espalda te lo agradecerán!